jueves, 18 de mayo de 2017




Si vamos más allá de un titular, el asunto es mucho más profundo de lo que muchos pretender simplificar. No se trata si soy “sanchistas” o “susanista”, el tema es como quiero vivir el socialismo. Porque ser socialista es una forma de vida, unos valores, unos principios. Y por tanto todas las acciones de la vida de un socialista están basadas en esos principios fundamentales.

Ser socialista es ser pacifista, feminista, ecologista, sindicalista, activista, defensores de la diversidad, la integración, la igualdad de oportunidad entre otras muchísimas causas. Y creemos en lo público por encima de todo, como elemento vertebrador que hace las sociedad más justas, más iguales, más fraternales. Vivimos uno de los mayores ataques a lo público y al estado de bienestar de la historia reciente. Un ataque neoliberal que atacando a lo público ataca a todo aquello que nos define, quebrando a la mayoría social, y generando más desigualdad, pobreza e injusticia.

No perdimos elecciones generales, municipales o autonómicas por un cabeza de cartel u otro, las perdimos porque desde que Zapatero hizo la reforma laboral del 2010 y la reforma express de la Constitución la dirección del Partido (que NO sus militantes) ayudo y colaboró con el neoliberalismo político y económico. Y respecto a esto decía nuestro fundador Pablo Iglesias, “quienes contraponen liberalismo y socialismo, o no conocen el primero o no saben los verdaderos objetivos del segundo Y los votantes no lo ha perdonado, y la militancia nos revolvimos cada uno como pudo. Porque la base del socialismo como también decía Pablo Iglesias es “la entera emancipación de la clase trabajadora: es decir, la abolición de todas las clases sociales y su conversión en una sola de trabajadores libres e iguales, honrados e inteligentes”. Y a eso se debe toda la acción, todo el trabajo, todo el esfuerzo de todo aquel o aquella que se considere socialista. Por tanto somos lo contrario, lo antagónico al liberalismo a los conservadores. Y facilitar por activa o por pasiva un gobierno de ellos, es traicionar nuestros ideales, principios y fundamentos.

Desde 2011 el Partido Popular aplico leyes que destrozaron a la mayoría social, provocaron regresión en los temas troncales de nuestra identidad, fueron a por los sindicatos, sin piedad sacudieron la sanidad y la educación pública, privatizaron o desmantelaron servicios públicos apostado por conciertos privados. La Ley de Dependencia la desmontaron, hubo regresión en Igualdad de género, hay un tremendo repunte de LGTBIfobia, aumentaron  con sus políticas en cientos de miles las familias pobres, hay niños en extrema pobreza que no realizan las comidas que cualquier niño debe realizar, y podría seguir con un largo etcétera de ataque de la derecha, del neoliberalismo a la mayoría social.

Por eso el NO es NO, no era la consigna de Pedro, era el sentir de la inmensa mayoría de la militancia, que no podíamos tolerar que el PSOE facilitase un nuevo gobierno del Partido Popular. Y no vale eso que desde el Parlamento si el gobierno no tiene mayoría absoluta se puede controlar, véase lo que llevamos de legislatura. Y no hacía falta la abstención del PSOE para que gobernasen, lo hemos visto con los Presupuestos Generales del Estado. Y los nacionalistas (esos que rompen España) les han servido hoy para los Estibadores.

El PSOE solo sobrevivirá si vuelve a su sitio natural, no hace falta inventar nada, releer a Pablo Iglesias, nuestros principios fundamentales y ser coherentes con lo que significa ser socialista, que como decía al principio, es una forma de vida. Por eso voto a Pedro Sánchez, porque propone volver a la génesis de nuestra identidad, porque su programa rezuma izquierda por todos lados. Lo otro lo respeto, como debemos respetarnos todos y todas los que formamos la familia socialista, pero son los que han permitido que gobierne la derecha, que de una forma más dulcificada porque no tienen mayoría absoluta, nos seguirán machacando y eliminando derechos.

Por todo lo dicho, el 21 mi voto es para Pedro. Porque creo que la militancia tenemos que tomar las riendas de este partido. Porque fuimos muy fuertes cuando estábamos en la calle con los que nos necesitaban, con la mayoría social, desde las asociaciones de vecinos, la APAs, las ONGs, los movimientos sociales. Cuando codo a codo con la sociedad civil transformábamos la sociedad, en busca de la emancipación. El programa de Pedro me invita a eso, y acepto el reto. 
 
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